RECURSOS
Los colores hablan, se comunican, expresan emociones e ideas, hacen volar la imaginación, nos transportan a otros lugares e inevitablemente, causan distintas sensaciones en función de la forma de combinarlos, de su intensidad, de sus contrastes… Por eso, el uso adecuado de los colores en un evento es un aspecto fundamental para garantizar el éxito del mismo.
No podemos controlarlo, es inevitable. Cuando llegamos a cualquier evento, los colores son los primeros encargados de transmitirnos información, y pueden hacer que nos sintamos más o menos cómodos. Es por esta razón que elegir adecuadamente la paleta cromática de tu evento puede ser determinante para conseguir las emociones que buscas.
Normalmente, los eventos tienen una duración determinada previamente que no suele ser muy prolongada en el tiempo. Es por esta razón que debemos elegir los colores que utilizaremos asegurándonos de que estos causarán la mejor impresión posible en los asistentes en un período limitado.
Por ejemplo, cuando se trata de un evento con un tinte muy institucional en el que se pretende recrear un espacio elegante, hay que intentar huir del uso de colores llamativos o demasiado intensos. Estos sí que son apropiados para las presentaciones de marca o celebraciones en las que se quiera utilizar el tono corporativo de la empresa que protagoniza el evento. Esta práctica es muy recomendable, pues de este modo, los asistentes se ven envueltos en una atmósfera corporativa en la que la empresa afianza su imagen y da visibilidad a las características que quiera destacar o a los matices concretos que le hagan diferenciarse del resto. Eso sí, tampoco es muy apropiado usar distintas tonalidades en un mismo espacio porque se puede dar lugar a una sensación de confusión. Lo ideal en estos casos es utilizar solamente uno o dos colores principales.
Hay algunas claves imprescindibles que deben tenerse en cuenta a la hora de organizar un evento: para conseguir un entorno armónico que invite a la calma y a la relajación, los colores fríos suelen ser los mejores aliados. Si lo que se pretende es crear un evento cañero, que sea muy llamativo e impacte desde el primer momento, habrá que decantarse por tonos cálidos y más intensos.
Otras cuestiones, simplemente, responden a la lógica: no tendría sentido utilizar tonos oscuros y estridentes en espacios pequeños, pues los asistentes sentirán que el lugar en el que se encuentran es aún más reducido.
También es muy importante pensar en las fotografías o los vídeos que quedarán como recuerdos de un evento (que, al fin y al cabo, es un acto efímero) a la hora de elegir los colores. Independientemente del tipo de evento que se organice, siempre hay que prestar especial atención a las imágenes que podrán obtenerse del mismo. Redes sociales, blogs, prensa online y offline, tu propia página web… Ten en cuenta que tu evento se alargará en el tiempo gracias a la difusión de contenido audiovisual que se hará en todos estos medios, ya sea porque es de interés general o porque simplemente, los asistentes lo difunden. Cuida todos los detalles, por pequeños que sean. Por ejemplo, nunca utilices colores muy oscuros como trasera del lugar donde vayan a intervenir personalidades, ya que si éstos visten trajes oscuros, el contraste será muy pobre y las fotografías de esos momentos quedarán muy deslucidas.
Otro aspecto que no se puede pasar por alto es la procedencia de quienes vayan a estar presentes en el evento y el lugar en el que se realizará el mismo. No podemos olvidar que la simbología de los colores cambia según la cultura de cada país. Esto ocurre con el color verde, por ejemplo. En Occidente está relacionado con la buena suerte, la virtud, la esperanza, la calma… Este mismo color, en el norte de África significa corrupción y en Indonesia está totalmente prohibido.
¿Sabías que, desde el 2000, la empresa estadounidense Pantone predice el color del año? De este modo, intenta interpretar el espíritu de la época a través de la teoría del color, buscando pistas en la moda, el diseño y el interiorismo. Este 2022, el color elegido ha sido el ‘Pantone 17-3938 Very Peri’, una tonalidad de azul con un matiz rojo, ideal para numerosas aplicaciones en diseño gráfico y multimedia, así como de empaques, etiquetas y embalajes.
No obstante, hay colores que han sido siempre los más recurrentes a la hora de organizar eventos: el blanco y el negro, básicos que no suelen dar lugar a error. El color blanco da sensación de frescura, de transparencia y de perfección. El negro aporta elegancia, empoderamiento y distinción. Hay otros colores que cada día vemos más en las celebraciones de todo tipo de eventos, como el naranja. Esta tonalidad alegre y cálida estimula el apetito y la comunicación. Por eso es apropiado para eventos en los que se busque el diálogo y la interacción de los asistentes. El azul invita a la relajación, a mantener un estado de ánimo tranquilo. Si lo que se busca es transmitir serenidad y calma, es el color perfecto.
En Noved Eventos tenemos nuestro color corporativo definido desde hace casi 20 años, los mismos que estamos a punto de cumplir: el ‘Pantone 255C’, una tonalidad morada que simboliza autenticidad, creatividad, sensibilidad y verdad; valores que entendemos como fundamentales y sin los que no entenderíamos el trabajo como organizadores de eventos.
Y tú, ¿te habías parado a pensar en la importancia de elegir bien los colores en un evento?